El plus por antigüedad es un complemento salarial que se añade al sueldo base de los trabajadores en función de los años de servicio prestados en una empresa. Este beneficio económico tiene como objetivo reconocer y recompensar la fidelidad y la experiencia de los empleados en la organización.
Regulación del plus por antigüedad
La regulación del plus por antigüedad se encuentra establecida en los convenios colectivos, que son acuerdos negociados entre los representantes de los trabajadores y la dirección de la empresa. Estos convenios establecen las condiciones laborales y salariales de los empleados, incluyendo el pago del plus por antigüedad.
Convenios colectivos
Los convenios colectivos son acuerdos que se establecen entre los sindicatos y las empresas para regular las condiciones de trabajo y los derechos de los empleados. En estos convenios se establece el porcentaje o la cantidad fija que se añade al sueldo base por cada año de antigüedad.
Es importante destacar que los convenios colectivos pueden variar según el sector de actividad y la ubicación geográfica de la empresa. Por lo tanto, es necesario consultar el convenio colectivo correspondiente para conocer las condiciones específicas del plus por antigüedad en cada caso.
Incremento anual
El plus por antigüedad suele incrementarse de forma anual, es decir, cada año que el trabajador permanece en la empresa se añade un porcentaje o una cantidad fija adicional a su sueldo base. Este incremento anual puede variar según lo establecido en el convenio colectivo correspondiente.
El objetivo de este incremento anual es reconocer y valorar la experiencia y la fidelidad del empleado a lo largo del tiempo, incentivando así su permanencia en la empresa.
Forma de pago
La forma de pago del plus por antigüedad también viene establecida en los convenios colectivos. En general, se suelen utilizar trienios, cuatrienios y quinquenios para calcular el importe del plus.
Un trienio corresponde a tres años de antigüedad, un cuatrienio a cuatro años y un quinquenio a cinco años. Cada uno de estos periodos tiene asociado un porcentaje o una cantidad fija que se añade al sueldo base del trabajador.
Por ejemplo, si un convenio colectivo establece que se añade un 5% al sueldo base por cada trienio, un trabajador con 9 años de antigüedad recibiría un plus por antigüedad del 15% sobre su sueldo base.
Condiciones para devengar el plus
Para poder devengar el plus por antigüedad, es necesario cumplir ciertas condiciones establecidas en los convenios colectivos. Estas condiciones pueden variar según el sector de actividad y la ubicación geográfica de la empresa.
Trabajadores por cuenta ajena
El plus por antigüedad está destinado a los trabajadores por cuenta ajena que forman parte de la plantilla de la empresa. Estos empleados deben tener un contrato laboral y estar dados de alta en la Seguridad Social.
Los trabajadores por cuenta ajena tienen derecho a recibir el plus por antigüedad a partir del primer año de servicio en la empresa. A partir de ese momento, el plus se va incrementando cada año según lo establecido en el convenio colectivo correspondiente.
Excepciones: becarios
Los becarios no tienen derecho a recibir el plus por antigüedad, ya que su relación con la empresa es de carácter formativo y no laboral. Los becarios realizan prácticas en la empresa con el objetivo de adquirir experiencia y conocimientos en su área de estudio.
Es importante destacar que los becarios no tienen un contrato laboral y no están dados de alta en la Seguridad Social, por lo que no cumplen las condiciones necesarias para devengar el plus por antigüedad.
Pérdida de antigüedad
La antigüedad se pierde al extinguirse la relación laboral con la empresa. Esto significa que si un trabajador deja de trabajar en la empresa, ya sea por despido, renuncia voluntaria o jubilación, pierde el derecho a recibir el plus por antigüedad.
Es importante tener en cuenta que la pérdida de antigüedad no afecta a otros derechos adquiridos por el trabajador, como las indemnizaciones por despido o las prestaciones por jubilación.
Consideraciones especiales
Además de las condiciones generales mencionadas anteriormente, existen algunas consideraciones especiales a tener en cuenta en relación al plus por antigüedad.
Ámbito temporal
Existen situaciones en las que el ámbito temporal no computa para el plus por antigüedad en la nómina. Por ejemplo, durante un periodo de excedencia voluntaria, el empleado no está trabajando en la empresa y, por lo tanto, no se acumula antigüedad.
De la misma manera, durante el periodo en el que el empleado tiene derecho a salarios de trámite, como en el caso de una baja por enfermedad o accidente laboral, tampoco se acumula antigüedad.
Trabajadores fijos discontinuos
En el caso de los trabajadores fijos discontinuos, el plus por antigüedad se calcula a partir de toda la relación laboral, es decir, se tienen en cuenta todos los periodos de trabajo, incluso aquellos en los que el empleado no está trabajando.
Los trabajadores fijos discontinuos son aquellos que tienen una relación laboral estable con la empresa, pero trabajan de forma intermitente o en determinadas temporadas del año. Estos empleados tienen derecho a recibir el plus por antigüedad en función de todos los años de servicio prestados en la empresa, incluyendo los periodos en los que no están trabajando.
El plus por antigüedad es un complemento salarial que se añade al sueldo base de los trabajadores en función de los años de servicio prestados en una empresa. Su regulación se encuentra en los convenios colectivos y su forma de pago varía según lo establecido en dichos convenios. Es importante cumplir las condiciones establecidas para devengar el plus y tener en cuenta las consideraciones especiales en relación al ámbito temporal y los trabajadores fijos discontinuos.