El IBI se puede desgravar: gastos deducibles en la declaración de la renta

Gastos deducibles en la declaración de la renta

Al momento de hacer la declaración de la renta, es importante conocer los gastos que se pueden deducir para reducir la cantidad a pagar o aumentar la devolución. Uno de los gastos que se pueden desgravar es el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). A continuación, veremos algunos de los gastos deducibles en la declaración de la renta.

Gastos de reparación y conservación

Los gastos de reparación y conservación de la vivienda son deducibles en la declaración de la renta. Esto incluye cualquier tipo de reparación o mejora que se realice en la vivienda, como por ejemplo, la pintura, la fontanería, la electricidad, entre otros. Es importante guardar todas las facturas y justificantes de pago de estos gastos, ya que serán necesarios al momento de hacer la declaración.

Impuestos y tasas municipales

El IBI es uno de los impuestos que se pueden desgravar en la declaración de la renta. Este impuesto se paga anualmente y su importe varía en función del valor catastral de la vivienda. Además del IBI, también se pueden desgravar otras tasas municipales, como por ejemplo, la tasa de basuras o la tasa de alcantarillado. Es importante tener en cuenta que solo se pueden desgravar los impuestos y tasas municipales correspondientes a la vivienda habitual.

Suministros

Los gastos de suministros también son deducibles en la declaración de la renta. Esto incluye los gastos de luz, agua, gas, teléfono, internet, entre otros. Para poder desgravar estos gastos, es necesario que la vivienda esté destinada a la actividad económica del contribuyente, como por ejemplo, si se trabaja desde casa. En este caso, se puede deducir un porcentaje de los gastos de suministros en función del espacio que se destine a la actividad económica.

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Intereses de la hipoteca

Los intereses de la hipoteca también se pueden desgravar en la declaración de la renta. Esto incluye los intereses pagados por la adquisición, construcción o rehabilitación de la vivienda habitual. Es importante tener en cuenta que solo se pueden desgravar los intereses correspondientes a la vivienda habitual y que el importe máximo deducible es de 9.040 euros anuales.

Otros gastos deducibles

Gastos de formalización del contrato

Los gastos de formalización del contrato de alquiler también son deducibles en la declaración de la renta. Esto incluye los gastos de notaría, registro de la propiedad y gestoría. Es importante guardar todas las facturas y justificantes de pago de estos gastos, ya que serán necesarios al momento de hacer la declaración.

Seguros

Los gastos de seguros también son deducibles en la declaración de la renta. Esto incluye los seguros de hogar, los seguros de vida y los seguros de protección de pagos de la hipoteca. Es importante tener en cuenta que solo se pueden desgravar los seguros correspondientes a la vivienda habitual.

Amortización de bienes inmuebles

La amortización de bienes inmuebles también se puede desgravar en la declaración de la renta. Esto incluye la depreciación del valor de la vivienda y de los elementos que la componen, como por ejemplo, los electrodomésticos. Es importante tener en cuenta que la amortización se calcula en función del valor de adquisición de la vivienda y que se puede deducir un porcentaje cada año.

El IBI se puede desgravar en la declaración de la renta, al igual que otros gastos relacionados con la vivienda. Es importante tener en cuenta que cada comunidad autónoma puede tener sus propias normas y deducciones, por lo que es recomendable consultar con un asesor fiscal para asegurarse de aprovechar al máximo las deducciones fiscales disponibles.

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