El servicio social comunitario es un conjunto de prestaciones, programas y equipamientos destinados a garantizar la igualdad de oportunidades en el acceso a la calidad de vida y a la participación social de toda la población. Se trata de un servicio de carácter local y territorial, que constituye el primer nivel de intervención del sistema de servicios sociales.
Características del servicio social comunitario
Local y territorial
El servicio social comunitario se desarrolla en un ámbito geográfico determinado, generalmente a nivel municipal. Está diseñado para atender las necesidades de la comunidad en ese territorio específico, teniendo en cuenta sus particularidades y características.
Primer nivel de intervención
El servicio social comunitario es el punto de acceso normalizado al sistema de servicios sociales. Es la primera instancia a la que acuden las personas y familias en busca de apoyo y atención. Desde aquí se realiza una evaluación de las necesidades y se establecen las intervenciones necesarias.
Garantía de igualdad de oportunidades
El servicio social comunitario tiene como objetivo principal garantizar la igualdad de oportunidades en el acceso a la calidad de vida y a la participación social. Esto implica que todas las personas, independientemente de su situación socioeconómica, género, edad o cualquier otra condición, deben tener las mismas posibilidades de acceder a los recursos y servicios necesarios para su bienestar.
Integrador y preventivo
El servicio social comunitario se configura como un servicio integrador, es decir, busca abordar las necesidades de las personas de manera integral, teniendo en cuenta todos los aspectos de su vida. Además, tiene un enfoque preventivo, es decir, se centra en evitar que las situaciones de vulnerabilidad o exclusión social se produzcan o se agraven, a través de la implementación de programas y acciones preventivas.
Tipos de servicios comunitarios
Servicios básicos
Los servicios sociales comunitarios pueden ser de carácter básico o específico. Los servicios básicos son aquellos que se consideran esenciales para cubrir las necesidades básicas de la población, como la atención primaria de salud, la educación, la vivienda, la alimentación, entre otros.
Servicios específicos
Los servicios específicos son aquellos que se dirigen a atender necesidades más específicas de determinados grupos de población, como por ejemplo, los servicios de atención a personas mayores, los servicios de atención a la infancia y adolescencia, los servicios de atención a personas con discapacidad, entre otros.
Competencias del servicio social comunitario
Competencia municipal
En general, los servicios sociales comunitarios son de competencia municipal. Esto significa que son los ayuntamientos los encargados de gestionar y coordinar estos servicios en su territorio. Sin embargo, es importante destacar que existen diferencias entre las comunidades autónomas en cuanto a la organización y gestión de los servicios sociales, por lo que las competencias pueden variar en cada caso.
El servicio social comunitario es un conjunto de prestaciones, programas y equipamientos que tienen como objetivo garantizar la igualdad de oportunidades en el acceso a la calidad de vida y a la participación social de toda la población. Se caracteriza por ser local y territorial, constituir el primer nivel de intervención, garantizar la igualdad de oportunidades, ser integrador y preventivo. Puede ser de carácter básico o específico, y en general es de competencia municipal.